Rovellons en Conserva

El mérito de esta receta es único y exclusivo de mi madre. Primero porque estos rovellons o níscalos no los he preparado yo, los ha preparado mi madre y segundo porque la receta que publicaré a continuación es suya.

Mi madre es la persona que me ha transmitido todo el amor que siento por la cocina y la que me lo ha enseñado todo! Todavía recuerdo cuando me regaló mi primer molde para hacer bizcochos, era doble!!!! jajjja, podía hacer un bizcocho y una corona!!! Todavía lo tengo guardado, a pesar de que esta hecho polvo pero para mi es un tesoro, uno de mis mayores tesoros!

Por eso he pensado que sería bonitos dedicarle esta entrada en el blog con sus rovellons en conserva, los cuales prepara cada año y nos da algunos botecitos para cada hija, los cuales Quimet y yo degustamos con muchísimo cariño.

Deciros que si mi padre es uno de mis pilares en la vida, mi madre es el pilar mayor, porque sin ella la vida no tendría sentido, es la persona más buena que he conocido nunca, pero esto ya os lo explicaré otro día.

Ingredientes:

-Rovellons
-agua
-sal

Primero de todo limpiaremos con mucho cuidado todos los rovellons, cuidando de no romperlos. Escogeremos las setas que no sean muy grandes para luego poderlas meter en los botes.

A continuación, con un cepillito les retiraremos cualquier resto de tierra que puedan tener y los pasaremos por agua.

En una olla pondremos abundante agua con sal y cuando arranque a hervir introduciremos los rovellons y los cocinaremos durante unos 5-8 minutos. Retiraremos a un paño para que escurran bien y los meteremos en botes previamente esterilizados y los cubriremos con el agua de cocción.

Haremos el vacío poniéndolos boca abajo durante 24h y estarán listos para consumir en cualquier época del año!